¿Te acordás cuando no te quedabas dormido la noche anterior a un gran torneo? Es que no querías perderte esos partidos por nada en el mundo. Eso fue lo que vivieron más de 300 niños el pasado fin de semana en Loma Plata

La Copa Deporvida Abdiez se desarrolló el 8 de julio en el Menno Sport Verein de Loma Plata. Esta competencia, organizada por Deporvida en conjunto con la marca de ropas Abdiez, significó un hito en las competencias de Deporvida en el Chaco paraguayo. Fueron 6 escuelas deportivas las que se movilizaron desde los distintos puntos del Chaco para definir al campeón en 3 categorías. Tekove, Gol de Vida y MSV de Loma Plata, Shtanen Sha´ne de Filadelfia, el Deportivo Boquerón de Neuland y Ara Pyahu de Laguna Negra. Todos con el deseo de disfrutar el día y medir las fuerzas dentro de la cancha. Después de 30 partidos y 90 goles, así quedaron las posiciones:
M9 – Tekove Campeón
MSV Vicecampeón
M11 – Tekove Campeón
MSV Vicecampeón
M13 – Shtanen Sha´ne campeón
DBN vicecampeón
El tiempo durante los partidos fue amenizado por música agradable, una radio en vivo con entrevistas de los jugadores y organizadores. Abdiez hizo una serie de desafíos para que los presentes puedan ganar premios, lo cual obviamente entusiasmaba a muchos niños. Uno de los momentos más cruciales fue un mensaje evangelístico dado durante el tiempo de descanso al mediodía. Tobias Wall comparó la Copa Deporvida Abdiez con el torneo más importante que se estaba disputando en estos momentos: la batalla por el corazón de cada uno de los presentes. Dios y Satanás no escatimaban esfuerzos para quedarse con ese preciado trofeo. Dios incluso llegó a entregar a su único hijo Jesús por eso. La decisión de quién se quedaría con esa copa, la hacía cada uno. Solo con Jesús nuestro corazón hallaría perdón y salvación.
No podemos más que agradecer a Dios por el hermoso día y el cuidado que nos regaló. Agradecemos a Abdiez por ayudarnos a hacer de este evento una realidad como también a los diferentes patrocinadores. Extendemos también nuestros agradecimientos a los padres y familiares que acompañaron a sus hijos durante todo el día, al MSV por cedernos el local y a los árbitros por impartir justicia en los partidos. Todos colaboraron para que este día fuera inolvidable.
¡A seguir trabajando por el bienestar de nuestros niños y expandir el reino de Dios a través del deporte!